lunes, 14 de octubre de 2013


 












La Visión exacta para Enfrentarse al Fracaso… 


Toda persona que Dirige o Gerencia inevitablemente tiene en alguna parte de su vida la huella de algo no logrado, algo que no salió como esperaba o sencillamente el duro y triste fracaso en alguna situación, sin embargo, el éxito está en cómo lo vemos, como lo asimilamos y que partido le sacamos a esa situación indeseada.

Cada vez que nos enfrentamos al mundo en busca de algo que nos cause satisfacción también debemos tener en cuenta que existen las posibilidades de fracasar, esto como diría el Dr. Walter Dresel, está incluido en el precio de vivir, es el impuesto que debemos pagar en pos del éxito. Solo permaneciendo en la mediocridad y evitando el esfuerzo podremos postergar por un tiempo la sensación de haber perdido algo y menciono el término postergar porque la inmovilidad acrecienta nuestra impotencia frente a los desafíos básicos de la vida. 

Ciertamente a todos nos gusta y es más fácil hablar del éxito, alegrías y triunfos que ahondar en la incertidumbre del fracaso o el dolor que este nos provoca, pero la realidad es que existen innumerables libros, páginas web, conferencistas, etc., que nos presenta el éxito desde diversos puntos de vista, creando una falsa imagen de un ser humano que todo lo puede, invulnerable, dejando atrás una realidad como un templo, que siempre existen posibilidades en virtud de nuestras acciones y decisiones de equivocarnos, errar y obviamente fracasar.

Es decir, tenemos derecho a triunfar pero también debemos considerar la posibilidad latente de perder, si bien el fracaso lleva implícito el sentimiento de la derrota, asimilándolo con gallardía podemos ganar mucho de sus vivencias y con esto quiero decir, que nos instruye muchísimo el vivir en carne propia la caída, desorientarnos del camino, para luego con nuestro esfuerzo visionar el rayo de luz que presenta la salida, verdaderamente el fracaso nos torna más humildes, más reflexivos y más dispuestos a escuchar a quienes poseen más sabiduría que nosotros.

Los fracasos son sucesos que templan el alma y el espíritu, y nos van fortaleciendo para ayudarnos a enfrentar nuevamente la vida, de manera renovada estimulándonos a lograr nuevos objetivos, el fracaso vulnera severamente nuestra autoestima pero debemos aprender a desarrollar la tolerancia a la frustración, total,  quien Dirige o Gerencia es simplemente un ser humano, que  posiblemente se convierta en un Líder.

Gracias al Dr. Walter Dresel por enseñarme y apoyarme con sus conocimientos.

 
Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos, y un Respetuoso Abrazo Virtual. 

CEO / Carlos Omar Delgado Carpio
@liderentudia
http://liderazgoentudia.blogspot.com/