lunes, 31 de julio de 2023

31 de Julio de 2023 - Boletín Nro.453

Autoevaluación ... 

"Venezuela, es Urgente Reilusionarnos como País"

En días pasados me encontraba celebrando mi fecha de cumpleaños, considero de igual forma que fue un momento preciso y precioso para evaluar mi trayecto, para considerar mi camino, para reflexionar sobre lo que hasta ahora he realizado y reacomodar los enfoques necesarios para continuar la ruta. Pero no solo por esto, sino también, que realizando estas reflexiones abro espacios para tomar acciones y decisiones más acertadas, sobre todo en lo que aún me falta por conquistar y por consolidar de la visión y objetivos que tengo en mente hasta el sol de hoy y donde el Creador lleva la batuta por ser el artífice de mis días y dueño del aire que respiro.

Saben algo, para mí este año no ha sido nada fácil, por el contrario, ha sido complejo por muchos temas y circunstancias de vida con los que no contaba, inclusive por capítulos que debo cerrar poco a poco para darle oportunidad a nuevos horizontes que considero merecer y en los que debo medir mis verdaderas fortalezas, por temas que para mí eran secundarios y que ahora se convirtieron en protagonistas totales. En ningún libro está escrito que el ejercicio del liderazgo es invulnerable, infalible y ajeno a la adversidad, y si existiese, ese texto les está diciendo la mayor mentira del mundo, porque como les he manifestado siempre el líder es esencialmente humano y no una persona con superpoderes que nada le afecta, el líder es una conjunción de acción y espiritualidad, de soledad y de entornos, de aprender a escuchar y de sabias consultas, de prepararse para cada situación, de fluir entre la escasez y la abundancia y en ambos casos saber surfear la ola, pero no está lejos de un sabroso y bien pronunciado “! Mandar todo al carajo!”, cuando como cualquiera se siente abrumado, desesperado, acorralado, y hasta disminuido por factores que confluyen en su quehacer diario, la única diferencia que marca la pauta es la siempre útil caja de herramientas que debe portar consigo en todo momento como un maletín de primeros auxilios y que le facilita equilibrar sus emociones, pensar con serenidad aún en la tormenta, soportar con razonamiento los embates que ahora dispersan los pensamientos y que ayudan a optimizar el carácter y a seguir creciendo en sabiduría con todo y los malos momentos que pueda estar pasando.

Autoevaluarse significa decirse las verdades y no adornarse los oídos, no significa contarse cosas refrescantes frente al espejo para generar un aura de normalidad y tranquilidad, pero si significa que estás vivo, que estás de pie, que la lucha permanece y te enaltece, que respiras, que tienes menos fuerzas pero aun mucho ánimo, que puede ser que estés débil pero continuas la franca recuperación de todas tus facultades, que puede ser que todo te ataque y se enfrente contra ti, pero eso te recordará en cada instante que también eres tú quien posees las tácticas y estrategias que te ayudaran a salir adelante, puede que en un primer momento no seas el vencedor, pero saldrás fortalecido con la práctica y el ejercicio diario de tus valores, principios y convicciones. Si, las cosas no han estado fáciles, pero un líder sabe y entiende que mientras su Creador este a su lado y de su lado todo será una vívida experiencia para su bien, para su madurez, para acrecentar su inteligencia para consolidar sabiduría, para proyectar conocimientos, para generar bienestar y productividad, y sobre todo, para entregar a otros el ejemplo de un camino que no te lo contaron, sino que lo viviste y transitaste en tus propios pies, con lágrimas y sonrisas, con desconcierto, incertidumbre y hasta con ausencia de la tan amada paz, pero eso y en su momento justo también te brindará el brillo y la gloria con el que podrás impactar en el mero centro del corazón de quienes formas y escuchan tus palabras, siendo el corazón el sitio justo y esencial donde nace el liderazgo. Porque el líder se forma y se crece no solamente de lo académico e instruccional, sino también de la vida, de la confluencia de sus acciones, errores y consecuencias, de la superación del obstáculo, de la intranquilidad, el empeño y la impaciencia por consolidar lo mejor y de su más sana intención por servir a quienes merecen aprender de esa magnífica aventura llamada vida pero a través del ejercicio de tu liderazgo. Tenlo Presente

Carlos O. Delgado C.

@liderazgoentudia

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual.