13 de Febrero de 2017
Boletín No.276
Liderando con Amor,
Sentimientos y Emociones…
Para
el Líder, el Director o el Gerente la palabra amor no es un término que le es
extraño, por el contrario, al igual que en el desarrollo personal y en su vida
particular, el amor se convierte en esa inyección de empoderamiento,
motivación, esperanzas, sueños, realidades y logros que deben unirse a la
capacidad y al talento para plasmar en armonía con su crecimiento humano un cúmulo de experiencias que se traducen en su proyección y en el éxito personal
y profesional.
Dice
el
padre de los libros, que existen la fe, la esperanza y el amor, pero de todos
ellos el sentimiento más grande es el amor (Libro de Corintios Capitulo 13) y
es que en base a esa noble semilla de gran potencia y portentoso calibre
denominada amor, se imprimen en el espíritu, las ganas y los deseos para que
cada persona pueda lograr y consolidar lo increíble, lo impensable, lo
magistral, pero eso sí, sin olvidar los sabios ingredientes que están sazonados
con mucha fe, sin perder la esperanza y realizando todo con gran empeño y mucho
amor, aunque no lo creas, eso también sucede en el marco gerencial.
Es
por ello que dentro de lo que implica el sentimiento y las emociones, liderar
con el corazón genera de antemano una empatía contigo y con el entorno que dará
vida a las ideas que propongas, no es menos cierto que desde tiempos
inmemorables los sentimientos y las emociones son los que nos han movilizado a
la acción, lo que hace a su vez que un líder se convierta en un elemento
inspirador y que en el interior de su personalidad confluyan la emoción y esa
misma inspiración que lo hará distinto y reconocido en el marco de sus
actuaciones.
Es
así,
que un líder debe aprender el buen manejo y gestión de las emociones y que las
mismas no deben contraponerse con su profesionalismo y la claridad de su
misión, para ello, debe entenderse que esto es un proceso continuo de
entrenamiento individual en el cual vamos adquiriendo habilidades para el
control de esas emociones y esos sentimientos. En este sentido te recomiendo,
que para gestionar las emociones empieces por ti, por como interactúas de forma
efectiva con el entorno y si generas empatía con los tuyos. Sintonízate de
igual forma con las emociones de los demás, que se observe y aprecie la
preocupación por tu equipo. Se extrovertido, habla con seguridad, comparte con
los demás, inicia conversaciones y no te cohíbas de brindar tu mano. Mejora tu
Habilidad para hablar en público, no deja de ser irritante en este mundo actual
que personas que poseen posiciones de “liderazgo” y pueden compartir miles de
conocimientos y pensamientos con los demás, no sepan transmitirlos de una
manera calmada y persuasiva, en este sentido, es importante que conectes de
manera visual con tu audiencia en la intención de reforzar el mensaje
transmitido. Asimismo, no pierdas la oportunidad de usar tu lenguaje corporal
recuerda que lo que haces, habla más de ti que lo que dices. Enamora con tus
historias. Una buena forma de conectar con los demás es exaltando sus
emociones. Hazles reír, llorar, gritar… Lo que se te ocurra, pero se divertido;
y diferente.
Finalmente,
y como elemento cúspide de tu acción de liderar, ayuda a los demás a ser
felices, usa tus emociones positivas para contagiarlas al resto e incentiva a
tu grupo a llevar su trabajo con espíritu alegre y cooperativo, veras que todo
funcionara mejor, para tu bien y el bienestar de la organización.
Dios
les Bendiga, mis Mejores Deseos y
un Respetuoso Abrazo Virtual.
Carlos O. Delgado C.
CEO & Management
Trainer de "Liderazgo en tu Día"