domingo, 6 de marzo de 2016


07 de Marzo de 2016

Boletín No.245
Introspección

El vocablo introspección proviene del latín “introspicere”, que significa “inspeccionar  dentro”. En  términos  generales  y  según  la  etimología,  la introspección es  la  observación  que  el  individuo  hace  de  su  propio  mundo interior,  de  sus  cogniciones,  emociones,  motivaciones  y  conductas (Bruno, 1997; DRAE, 2004) 

Es así, que todos los parámetros de acción personal y profesional indican que el respeto, el dialogo, la escucha activa, los valores, el deseo de ser mejor y hacer mejor a una organización u entorno social y con ello a las personas que la conforman, son aditivos que deberían estar incorporados en el ADN o por lo menos en la constante búsqueda de una persona que ejerce el liderazgo como herramienta de logro y consolidación de objetivos, sin embargo y en muchísimos casos la realidad se encarga de mostrarnos o hacer evidentes las deficiencias que los hombres y mujeres que Gerenciamos y que nos debemos al Liderazgo poseemos, es decir, vamos cargando por la ruta de vida en los términos de “como vaya viniendo vamos viendo”. Situación que potencia la deficiencia en el plano personal impactando al plano organizacional y casi nunca en base a lo expresado terminamos de solucionar tan concurrentes debilidades. Es por esto y en virtud de lo descrito que expreso lo siguiente:

Siéntate en un momento de introspección, tómate ese café contigo que muchas veces hace falta para encontrarse, revisa lo que has hecho y detente para inspeccionar tu labor, tus relaciones y tus frutos, existen momentos vitales para preguntarse si ¿Estas logrando los objetivos planificados? si ¿Has tratado a tu Gente con Respeto? si ¿Los has Escuchado de verdad y de corazón? Si ¿Conversas con ellos? o ¿Cómo está tu relación con los Códigos de Valores? ¿Te esmeras por tu equipo y la organización? y como estas, un sinfín de preguntas que llevan a darle valor e indicadores a la gestión que realizas. Si ves en tu interior te darás cuenta de las debilidades en las que debes trabajar para minimizarlas, las constantes amenazas que atormentan tu labor, las eminentes fortalezas que posees y que muchas veces no te das ni cuenta, como también, esas grandes oportunidades que te permite la vida para transformar los aspectos humanos que se traducen en fallas gerenciales por no ser contrarrestadas a tiempo.

Vive ese momento contigo, no dejes de reflexionar con respecto a todo lo que implica tu mundo, su impacto y los esquemas que puedas manejar, sincérate contigo y asume los cambios o transformaciones que requieras hacer en ti para remozar tu nivel gerencial, eso  permite que reinventes tu desempeño y la relación con los miembros de tu equipo, es primordial luego de esa introspección que comentes tus hallazgos y como pretendes darle solución, busca los apoyos necesarios en el talento humano que te rodea y no descartes ninguna opinión que pueda servirte de ayuda. Valora las intenciones sinceras, las palabras y los gestos que se dirijan a convertir tu personalidad en estimada, querida y necesaria para los tuyos, y sobre todo, no dejes de realizar estos ejercicios de introspección que facilitan el conocerte de lo interno a lo externo para transcender como mejor Hombre o Mujer ganado al Liderazgo y con ello a su mejor instrumento de logro, el Talento Humano.
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Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual. 

Carlos O. Delgado C.
CEO de Liderazgo en tu Día & Management Trainer