20 de Febrero de 2017

 

  Boletín No.277

 

 Sentimientos Gerenciales (1)…

Existen valores de vida y aspectos necesarios en el quehacer humano y profesional que un Líder, un Director o un Gerente no puede descuidar por la trascendencia y significancia que poseen, es así, como nos encontramos que el Tiempo es una instancia que debe ser altamente invertida, respetada y valorada actuando en base a la prudencia que implica utilizar la justa medida que involucre dejar huellas y enseñanzas para las tuyos y que se retribuyan en crecimiento para ti. A este le acompañan las Palabras, herramienta fundamental del Líder con las cuales impacta a los suyos, digna expresión de sentimientos y emociones que deben utilizarse con certero positivismo, sin descartar de ellas el rigor de la disciplina y la trascendencia del amor por los miembros del equipo, siempre se ha dicho que las palabras tienen poder, pues créelo, es cierto, con ellas humillas o exaltas, bendices o maldices, cambias una actitud, potencias a tu equipo o hundes indefectiblemente a una persona, por ello, úsalas con sabiduría. Otro aspecto que no debes descuidar son las Oportunidades, no las desperdicies, aprende a reconocerlas, no permitas quedarte con el sinsabor de expresar ¿y si lo hubiera hecho? por tanto, búscalas, asóciate a personas que te ayuden y te nutran para encontrar el camino correcto y no fantasioso de la vida, existen en este mundo momentos, personas y hasta palabras que pueden cambiar tu vida, aprende a discernir sobre ellos y toma la mejor opción, pero si te equivocas… convierte el error en una oportunidad para crecer e impulsarte a lo mejor.

No permitas que nada destruya tu vida, ni tus momentos, o el compartir con el equipo, el bienestar de una sonrisa o el placer de una jornada laboral, el ver crecer a los demás o el encanto de una meta lograda infiltrando el Enojo entre tus constantes acciones o actitudes personales, deja que todo fluya hacia el encuentro del acierto. Aprende a ceder y dejar que otro elemento de tu equipo genere aportes, permite el error como parte del crecimiento, de la enseñanza y el aprendizaje, por tanto, no dejes que el Orgullo gobierne tu actividad gerencial. Más allá de estos sentimientos efectivamente negativos, es humano que te molestes, disgustes y hasta apartes a miembros de tu equipo por situaciones imponderables que dañen al colectivo o al logro del objetivo, pero no por cuestiones personales que deben respetarse, ahora bien, no albergues en ti el grave sentimiento del Odio que solo corroe y perturba al espíritu del líder que está presente en ti.

Siempre las inconsistencias pueden estar en tu camino, lo difícil o complicado, lo no tan sencillo, lo que preocupa y ocupa, tanto que te quite el sueño, pero sin embargo, ello te brindara la inteligencia, fortaleza y sabiduría para sobreponerte a cualquier adversidad,  porque un Líder, un Director o un Gerente no negocia su espíritu, no se amilana, cree en su Humildad para estimular y generar empatía y lazos afirmativos entre los suyos, no la finge. Habla y actúa con Sinceridad, porque su presencia y palabra es sinónimo de verdad, de cumplimiento y de confianza. De Igual forma, un Líder valora en sobremanera la Amistad y también la ofrece con gusto, por eso le afecta y le trastoca el engaño, la traición o la falla intencionada, por ello, es primordial su cuidado y mantenimiento, le es vital construir afectos y generar escudos que protejan su personalidad y no afecten a los objetivos programados, separando debidamente al buen amigo de un gran compañero de equipo.

 

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual.

 

Carlos O. Delgado C.     

CEO & Management Trainer de "Liderazgo en tu Día"

 

  13 de Febrero de 2017

 

Boletín No.276

 

Liderando con Amor, Sentimientos y Emociones…

 

Para el Líder, el Director o el Gerente la palabra amor no es un término que le es extraño, por el contrario, al igual que en el desarrollo personal y en su vida particular, el amor se convierte en esa inyección de empoderamiento, motivación, esperanzas, sueños, realidades y logros que deben unirse a la capacidad y al talento para plasmar en armonía con su crecimiento humano un cúmulo de experiencias que se traducen en su proyección y en el éxito personal y profesional.

Dice el padre de los libros, que existen la fe, la esperanza y el amor, pero de todos ellos el sentimiento más grande es el amor (Libro de Corintios Capitulo 13) y es que en base a esa noble semilla de gran potencia y portentoso calibre denominada amor, se imprimen en el espíritu, las ganas y los deseos para que cada persona pueda lograr y consolidar lo increíble, lo impensable, lo magistral, pero eso sí, sin olvidar los sabios ingredientes que están sazonados con mucha fe, sin perder la esperanza y realizando todo con gran empeño y mucho amor, aunque no lo creas, eso también sucede en el marco gerencial.

Es por ello que dentro de lo que implica el sentimiento y las emociones, liderar con el corazón genera de antemano una empatía contigo y con el entorno que dará vida a las ideas que propongas, no es menos cierto que desde tiempos inmemorables los sentimientos y las emociones son los que nos han movilizado a la acción, lo que hace a su vez que un líder se convierta en un elemento inspirador y que en el interior de su personalidad confluyan la emoción y esa misma inspiración que lo hará distinto y reconocido en el marco de sus actuaciones. 

Es así, que un líder debe aprender el buen manejo y gestión de las emociones y que las mismas no deben contraponerse con su profesionalismo y la claridad de su misión, para ello, debe entenderse que esto es un proceso continuo de entrenamiento individual en el cual vamos adquiriendo habilidades para el control de esas emociones y esos sentimientos. En este sentido te recomiendo, que para gestionar las emociones empieces por ti, por como interactúas de forma efectiva con el entorno y si generas empatía con los tuyos. Sintonízate de igual forma con las emociones de los demás, que se observe y aprecie la preocupación por tu equipo. Se extrovertido, habla con seguridad, comparte con los demás, inicia conversaciones y no te cohíbas de brindar tu mano. Mejora tu Habilidad para hablar en público, no deja de ser irritante en este mundo actual que personas que poseen posiciones de “liderazgo” y pueden compartir miles de conocimientos y pensamientos con los demás, no sepan transmitirlos de una manera calmada y persuasiva, en este sentido, es importante que conectes de manera visual con tu audiencia en la intención de reforzar el mensaje transmitido. Asimismo, no pierdas la oportunidad de usar tu lenguaje corporal recuerda que lo que haces, habla más de ti que lo que dices. Enamora con tus historias. Una buena forma de conectar con los demás es exaltando sus emociones. Hazles reír, llorar, gritar… Lo que se te ocurra, pero se divertido; y diferente.

Finalmente, y como elemento cúspide de tu acción de liderar, ayuda a los demás a ser felices, usa tus emociones positivas para contagiarlas al resto e incentiva a tu grupo a llevar su trabajo con espíritu alegre y cooperativo, veras que todo funcionara mejor, para tu bien y el bienestar de la organización.

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual.

 

Carlos O. Delgado C.     

CEO & Management Trainer de "Liderazgo en tu Día"

 

  

06 de Febrero de 2017

Boletín No.275

 Compromiso, Tiempo y Espacio…

Cada proceso gerencial que implica consolidar un objetivo, no debe considerarse como una mera tarea de carácter trivial, o al contrario, tan de suma confianza donde se supone que cada quien sabe lo que debe hacer, cada logro lleva inmerso en su esencia un compromiso, un arraigo y sentido de pertenencia que actúa como elemento motivador para convertirlo en hermosa realidad.

Es ahí donde entra en contexto la labor y afincada tarea de quien consolida el quehacer del equipo, es ahí, donde ese hombre o mujer que presta su nombre y responsabilidad para llevarla a cabo debe comprender de quien se rodea y hasta dónde puede llegar con ellos en el plano de sus capacidades y talentos, en el camino ira sumando o descartando, evaluando y conociendo a cada individualidad que comparte sus espacios, pero lo que no puede dejar de hacer es de impregnar a cada quien con la responsabilidad y compromiso que le corresponde ya sea por asignación, especialidad o liderazgo. Existirán miembros en tu equipo con mayor o menor confianza hacia tu persona, elementos a los que brindaras tu afecto y cercanía lo cual no puede confundirse ni hacerte dudar ante sus fallas o devaneos en el tránsito hacia la tarea encomendada. Disciplina y Excelencia debe ser tu premisa.

Como Líder, Director o Gerente, estas obligado a marcar la pauta, a establecer imperiosamente que a pesar de los añadidos de confianza, afecto, amistad y buenas relaciones laborales la organización se nutre de resultados que pueden impactarla para bien o para mal, donde las consecuencias negativas obviamente no deseados afectaran no solo lo que tu signifiques, sino también a lo que representas en el estadio organizacional; afectara tu calidad, preparación, ascendente y respeto ante el conglomerado que confía en ti. Recuerda que tu orientación y lo que se espera de ti debe estar dirigido a resultados positivos, con mínimos márgenes de error, con un alto grado de excelencia que facilite materializar en el espacio de tu desempeño efectivos resultados que se traduzcan en confianza y respeto en el marco de tu liderazgo, en base a ello, tendrás credibilidad o simplemente serás un Jefe.

Coloca tiempo para las cosas, dale tiempo a cada tarea, pero que se cumplan indefectiblemente como en el rotar de un reloj de arena, convierte tu actuación en un cronometro implacable donde el tiempo no se detiene a menos que actives el botón que paraliza la actividad en el exacto segundo de concluir en la meta.

Hazle entender a tu gente con empeño y nobleza el valor de un compromiso, que el mismo es con ellos, y con la organización, que el compromiso como valor de vida es de gran valía humana y profesional lo cual posee una cuantificación inestimable.  

Te encontraras en tu quehacer diario, personas que serán tu carga, tu lastre o tu punto de negatividad, has lo que debas hacer en el momento preciso y no te sientas culpable de no contar con ellas en nuevos derroteros, ni tu prestigio ni el valor de tu objetivo lo necesitan, lastimosamente la incompatibilidad también existe, entonces como dice el refrán “ponte rojo una y no morado mil veces” de ser posible confiéreles alguna oportunidad, pero sino, procede a potenciar a tu equipo, elimina lo que se convierte en piedra de tu camino y dedícate a triunfar, lograr y consolidar. Asume tu Compromiso, asigna y mantén el tiempo para lograrlo y regala a tu espacio humano y organizacional la gloria que se merecen.

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual.

 

Carlos O. Delgado C.     

CEO & Management Trainer de "Liderazgo en tu Día"