lunes, 8 de junio de 2015


08 de Junio de 2015
Boletín No.224

Utilizando Buenos Recursos…

Es para todos conocido y más aún para quienes estamos en estas actividades, que quien Lidera, Dirige o Gerencia debe acumular dentro de sus aspectos de vida y desarrollo profesional una gran cantidad de elementos que le faciliten actuar y por ende conseguir para su entorno humano y organizacional las metas que dentro de su planificación deba desarrollar para convertir sus palabras en hechos tangibles que serán determinantes para hacer visible el éxito o la poca efectividad de su gestión

Existen muchas técnicas, y cualquier cantidad de recursos que renombrados autores, coach y líderes con vasta experiencia nos pudieran legar para mejorar nuestra actuación, pero una de las herramientas principales para lograr el objetivo que determines en tu visión y quehacer profesional se traduce en elementos humanos más sencillos y efectivos, uno de ellos y de vital importancia y trascendencia lo conforman la escucha activa y la palabra adecuada, lo cual implica decir a cada quien la palabra que lo impulse y motive en su desarrollo pero orientándolo al logro y que la misma sea expresada en sintonía con cada oído de los miembros de tu equipo, es decir, que para poder expresarte hacia ellos y escuchar a cada integrante que acompañe tu gestión indiscutiblemente estas obligado a conocerle, a estudiarle, a involucrarte profesional y activamente con ellos de una forma sincera y abierta para que puedan entregarse de la misma forma en un ambiente de confianza y armonía que te permita llegarles de manera efectiva e imponerles de forma agradable tu plan de acción hacia lo que desees acometer dejando los espacios y aberturas para sanas discusiones que te permitan valorar sus opiniones y obtener de ellas los mejores dividendos.

Debes generar empatías, debes buscar en tu gente la sintonía y modulación necesaria que te permita identificar a cada uno de ellos como ser individual para luego poder utilizarlos en el mejor sentido como parte y miembro de un equipo que tú debes compactar y sobre todo alinearlos de acuerdo a sus capacidades y talentos en la persecución de la meta anhelada la cual está representada en la acción humana viéndola en el concepto espiritual, como también, en el aparte profesional donde se manifestará finalmente el trabajo realizado. Sencillamente es aprender diariamente a comunicarnos, a comunicarnos bien, a escucharles con atención seduciéndoles para el logro y activando con ello el aflorar de su mejor disposición para con nuestros planes y metas organizacionales, que obviamente impactan en nuestra actividad profesional, inspirando crecimiento, desarrollo, mejoras, bienestar y la persecución constante de nuevas actividades, es decir, debes saber comunicarte, debes escuchar bien a los tuyos para poder obtener lo mejor del equipo que acompaña tu gestión, no olvides jamás que tu equipo y como lo lideres serán tu marca, tu palabra y tu garantía ante el mundo que te rodea.  

Finalmente, enséñales a escuchar sobre el cambio, sobre las metas, sobre vencer las resistencias, en perseguir sueños y convertirlos en realidades, no dejes de inspirarlos con sinceridad, enséñales a revisar conductas a revisar las motivaciones que puedan limitarlos para poder ajustar sus comportamientos utilizando para ello la palabra adecuada que sintonice con cada oído de los miembros de tu equipo, escúchales y que te escuchen, háblales y que siempre te hablen.

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos, y un Respetuoso Abrazo Virtual.