martes, 8 de agosto de 2017

  
 08 de Agostde 2017

Boletín No.289

Inspirado por la Red...


Mucho se habla hoy del poder de las Redes Sociales, de su alcance e impacto en el individuo y en la sociedad. Pero, te has preguntado ¿cuánto de eso te ha impactado a ti?   ¿A cuánto de lo escrito y publicado le haces caso y lo asumes como consejo en tu cotidiano vivir personal y gerencial? En virtud de ello, hoy les escribo y me inspiro basado en distintos post que se remiten en la red social Instagram y que son de formidable aplicación a nuestro quehacer profesional.

Estas en cuenta que no Progresas cuando no te gusta leer y actualizarte, o cuando no madrugas para diagramar tu día, o cuando no planificas y programas tus objetivos, y por lo tanto estos no se proyectan con solidez. Sabes, que cuando no sonríes, no saludas o no entregas el mejor contenido de tu personalidad, el entorno, tu equipo, tus iguales o compañeros no tienen empatía contigo y por ende se afectan negativamente las metas y objetivos que deseas implantar. Entiendes, que cuando no te ocupas lo suficientemente de ti, por ejemplo, duermes o comes mal, no tomas tiempo para caminar o ejercitarte, o descuidas la potencialidad que brinda la familia, al final habrá que sustituirte de la organización porque no entendiste que los individuos son importantes pero no indispensables, y que la organización siempre será la organización,  y por ende, estará por sobre ti y funcionará contigo o sin ti. De igual forma, cuando de alguna manera quieres todo fácil, sin el esfuerzo que implica crear y consolidar, ni el fragor que involucra el trabajo para coronar el éxito, o si vives esperando un viernes como coloquialmente se pronuncia en la jerga popular, si es así, no estarás ganado a merecer respeto, consideración ni estima de quienes logran en base a subir los peldaños con verdadero arrojo, empeño y voluntad.

En este sentido y en nuestro quehacer profesional no podemos olvidar que “el hombre que mueve montañas empieza apartando piedrecitas” tal como lo expresó Confucio y que la única diferencia entre un buen día o un mal día es la Actitud que asumas para vivirlo, es decir, que el responsable de ese día eres tú, porque lo construyes solo tú. Asimismo, en el marco de la Actitud te aconsejo renunciar a pensar de más y suponer cosas en vez de orientarte al estudio y la realidad que te compete. No temas al cambio,  abrázalo como al amigo que te obsequia un regalo sorpresa, con las ansias de saber que dentro del empaque se encuentra lo mejor para ti, y de no ser así, saber que estás en capacidad de transformarlo en lo mejor para tus objetivos. No te enganches del pasado, evoluciona y conquista, recuerda que solo tropieza precisamente el individuo que avanza, aquel que aprende a levantarse y valora la caída como el aprendizaje vital del logro, por ello, debes asumir que Nada está Perdido cuando entregas lo mejor de ti para que ocurra.

Amigos(as), finalmente les recomiendo, solo conozcan de manera informativa a las personas que puedan limitar su progreso, no le den espacio ni se rodeen de ellas, somos merecedores de lo mejor, de las mejores personas a nuestro lado, de las que ayuden a potenciar nuestros objetivos, logros y éxitos.

Y pensar, que la inspiración de este Boletín nació de Instagram, gracias por ello… Visualicen el potencial que podemos obtener de una Red Social y usémosla con efectividad y proyección de vida.

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual.

Carlos O. Delgado C.
CEO y Management Trainer de "Liderazgo en tu Día"