domingo, 31 de enero de 2016


01 de Febrero de 2016
Boletín No.243
Dialogar para Ganar…

En la placidez que brinda el descanso observaba en televisión un documental referido a la Guerra Civil Española, palabras más palabras menos se estimaron en 400.000 mil personas las víctimas fatales de este enfrentamiento social, político y bélico tal como fue calificado en el referido documento visual, sin embargo, lo que determinó la resolución total del conflicto como en muchos otros casos que por cuestión de espacio no puedo adentrarme en detalles fue un sencillo termino que todos conocemos y creemos dominar “El Dialogo” lo cual parece tan fácil pero cuanto nos cuesta, es sencillamente sentarnos a Escuchar, Hablar, Respetarnos, Ceder de mutuo acuerdo y consolidar puntos medios que faciliten la Convivencia Armoniosa entre las partes. Cuántas vidas se hubiesen salvado, cuantos traumas y dolores no hubiesen existido.

El Líder, el Director, el Gerente verdaderamente debe cultivarse, fomentar y buscar incesantemente ser un artífice del dialogo, ahí se encuentra el punto de contacto con todo su entorno, el punto y circulo de su influencia y la máxima expresión de sus logros, es la manera de llegar y alcanzar, de influir y cambiar situaciones o personas. Sin temor a equivocarme, es por medio del dialogo donde se determina el cómo llegas y transmites a lo demás lo que genera la diferencia en lograr o no los objetivos planteados, de igual forma, es como se mide tu efectividad, como inspiras y trasciendes en los individuos y hechos que transcurren en tu diario quehacer humano y profesional, no olvidemos que el diálogo es una fuerza de espíritu, una voluntad de cortesía, de simpatía y estimación de parte de quien lo inicia lo cual nos obliga a salir de nosotros mismos. Por ello es de vital importancia no confundirlo con la discusión. El diálogo lleva a la comprensión; la discusión, a la amistad o la enemistad. Mejorarlo y adecuarlo a fines positivos depende de nosotros, Esforcémonos por dialogar para crecer, para crear nuevos horizontes que permitan construcciones en positivo que impacten en toda nuestra área de influencia maximizando potencialidades.

Podemos ejemplificar la efectividad y trascendencia del dialogo cuando recordamos la influencia de Jesús para con la humanidad  cuando sin escribir una sola palabra nos dejó su mensaje y fundó una doctrina, usando la palabra como medio de comunicación y diálogo con sus discípulos. Dialogar es acercarnos a la fuente de la amistad, la alegría, la comprensión y la esperanza, elementos que engrandecen la vitalidad de un hombre o mujer que persigue el norte de ser denominado Líder. En el dialogo también existen escollos y múltiples diferencias que puedan surgir, pero recuerda que el fin último lo tienes en tu mente y corazón, este debe ser tu objetivo, que siempre cuando actúes a través del dialogo tu finalidad es lograr lo mejor para todos, que todos sientan complacencia por el punto medio alcanzado en pro del bienestar del equipo, grupo u organización que representes.

Finalmente Recuerda, que los ingredientes básicos del diálogo que facilitan obtener sus frutos son: el Respeto, la Actitud de Escucha y la Empatía. También la Sinceridad, es decir,  Comunicarnos con el Compromiso de ser Claros y consecuentes tanto en nuestros actos como en nuestros sentimientos.
Por ello, Cultivémonos absolutamente todos para Dialogar.

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual. 

Carlos O. Delgado C.
CEO de Liderazgo en tu Día & Management Trainer

martes, 5 de enero de 2016


04 de Enero de 2016
Boletín No.242
Gerencia para un Nuevo Año…

Nos encontramos con nuevos días, con fuerzas renovadas, con ideas y promesas inmersas en nuestro intelecto que debemos construir, sacarlas del sueño y convertirlas en realidad, Dios nos proporciona un nuevo año de vida con el cual debemos comprometernos a través de nuestras capacidades a traducirlo en bienestar y logros sustanciales desde la óptica personal y profesional.

Un Líder, un Director o un Gerente no debe perder tiempo, porque reconoce que en su ámbito y en su entorno el tiempo perdido ya dejó de ser y tiene claro que es en el presente y hacia el futuro que se siembra y cosecha, lo pasado debe aquilatarse como elementos de experiencias positivas o negativas que ameritan ser evaluadas, seguidas o desechadas según sea el caso, sin embargo, el detenerse implica merma, vacío, improductividad, lujo que no puede permitirse porque el equipo y la organización cuentan con él, con la cordura, sus capacidades, y con esa inteligencia y sabiduría que tanto hemos trillado en nuestros escritos. Debe mantener en este nuevo ciclo que nos abre el Creador los equilibrios necesarios que fortalezcan su espíritu profesional, éxitos y logros incluidos, como también, aquellas actuaciones que impliquen dedicar tiempo a su formación y crecimiento y en todas ellas debe estar coronado por el pilar espiritual que implica su piso familiar, elemento que brinda estabilidad emocional y afectiva que siempre se proyectará y hará notar en cada momento de tu existir.

El Nuevo Año trae consigo expectativas, visiones y posiciones personales y organizacionales que deben ser consideradas pero ninguna de ellas limitantes para no permitir que entregues lo mejor de tu intelecto y servicio a la empresa, organización o equipo al que tus capacidades se deben, todo ello, como la responsabilidad inevitable de ser el guía y conductor de lo que debe convertirse en objetivos logrados con máxima eficiencia, aspecto del cual también eres el garante de su conquista, a fin de presentarte con éxito y con adversidades vencidas ante tu persona y ante quienes evalúen tu gestión. Tienes ante ti 365 días nuevecitos los cuales puedes convertir en la mejor de tus misiones y estimados proyectos. Por ello, tus seguidores, tus compañeros, tus liderados, tu equipo y organización esperan por el brillo que debes imprimirle a un mundo virgen que tendrás el honor de aperturar en base a tus capacidades y talentos que debes poner de manifiesto en todo el trayecto que estas por recorrer.

Ha transcurrido un año de aprendizajes, pero empieza otro en que debes dar vida a lo aprendido, es tu compromiso, es la lealtad con tu gente, es lo que se espera de ti en función de una jornada que inicias con el placer y virtud de extremar tus potencialidades en razón de obtener merecidos logros, no lo olvides, llénate y rodéate de lo mejor y de los mejores, tu liderazgo lo merece, tu persona lo merece, tu profesionalismo lo merece y más aún los tuyos lo merecen porque a todos debes servirles con el amor y principio de entender que el ejercicio del liderazgo está en tus manos para consolidar el bien común.

Feliz Jornada, el 2016 extiende su alfombra roja, pero tú decides como la transitas.

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual. 

Carlos O. Delgado C.
CEO de Liderazgo en tu Día & Management Trainer