domingo, 28 de agosto de 2016



29 de Agosto de 2016
Boletín No.260

Conviértete en la Persona Correcta…

Los tránsitos de vida que corresponden al quehacer humano y profesional le permiten a la persona conectarse y hacer empatía con seres que pueden darte una mano e impulsar tus sueños o con otros que solo contribuyen a tronchar tu destino, a cambiar las circunstancias a favor o en contra, o sencillamente retardar tus planes afectando tu objetivo. Sin embargo lo negativo se supera, nada dura para siempre como dice la canción permitiéndote convertir el error de un momento en una sabia oportunidad.

Es así, como en un instante de esa vida que menciono me topé con un Director que aposto por mí, por mi capacidad y deseo de aquel entonces para formarme y seguir cultivándome en el ámbito gerencial en una organización cerrada y en contra de facilitar el acceso a este tipo de programas universitarios de crecimiento en aquellos años. Fue mi convicción de querer hacerlo, de querer ser mejor por un peldaño más lo que me ayudo, pero también ante mis ojos existía y palpaba al que para entonces era mi Jefe luchando y enfrentándose a la organización para lograr que su subordinado (era su asistente en aquel entonces) pudiese acceder a niveles superiores educativos que al final favorecerían a la misma organización y que en ese momento dicha organización no tenía la visión o existía mezquindad de creer en los beneficios de poseer un profesional verdaderamente capacitado, lo cual pudiese ser de igual forma simple especulación, pero ese no es el caso que nos ocupa ahora.
Tuve la alegría y el honor de dedicar mi tesis de grado en la Universidad Simón Bolívar en Venezuela  a ese hombre que en esos instantes fue de gran apoyo sustancial para subir ese peldaño profesional empezando en paralelo un camino de amistad que siguió hasta el final de su existencia física hace pocas semanas.

Así como les hablo de este gran amigo, así te llamo al compromiso de convertirte en la persona correcta como lo fue él, como actuó él, en ser la persona que visiona y permite el crecimiento de los otros, que lucha y ayuda, que cree y estimula, pero no solo a la persona sino también a la organización que pertenece, porque cada humano que impulsas a lo exponencial de sus capacidades siempre sentirá afecto y apego por quien le permitió crecer y por supuesto, por la organización que entrego sin reparos los beneficios para lograrlo.

No seas piedra de tropiezo para nadie, convierte tu liderazgo, tu quehacer Gerencial y Directivo en el trabajo de un Alfarero, forma, diseña, transforma y logra piezas únicas a través de tu acción, construyendo y marcando tu sello sobre los individuos que haces crecer para el beneficio del mundo que te rodea, para el éxito organizacional y para la permanencia y trascendencia de tu liderazgo personal y profesional, porque donde exista un hombre o una mujer formado y orientado por ti casi seguro que en sus pensamientos y decisiones también estarás tú.  
Dedicado al Gran Amigo,
General de Brigada Oscar Gavidia Graterol (+)
Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos
y un Respetuoso Abrazo Virtual. 
 Carlos O. Delgado C.
CEO & Management Trainer de Liderazgo en tu Día

martes, 16 de agosto de 2016


15 de Agosto de 2016
Boletín No.259

Six Pack, que no se Olvide lo Básico…

Las Competencias Gerenciales según Hellriegel (2002) están conformadas por el conjunto de conocimientos, destrezas, comportamientos y aptitudes que necesita una persona para ser eficiente en una amplia gama de labores gerenciales y en diversas organizaciones. Según el autor mencionado, se relacionan seis competencias gerenciales que debes tomar en cuenta en su aplicación y dominio para tu ejercicio profesional, estas son básicas, no las olvides.

La Competencia de la Comunicación, es la capacidad de transmitir e intercambiar eficazmente información para entenderse con los demás, La comunicación es tanto formal como informal, un gerente mantiene comunicación formal, cuando utiliza boletines para informar a los empleados de acontecimientos y actividades importantes, manteniéndolos en permanente contacto.  Por otro lado, mediante la comunicación informal, los gerentes y/o directivos constituyen una red de contactos sociales para sentar las bases de la colaboración dentro y fuera de las organizaciones. La Competencia para la Planeación y la Administración, esta comprende decidir que tareas hay que realizar, determinar la manera de efectuarla, asignar los recursos que permitan llevarlas a cabo y luego supervisar la evolución para asegurarse de que se hagan. Así mismo, planear y organizar proyectos por lo general significa que los gerentes deben trabajar con empleados altamente competentes, para aclarar objetivos y sobre todo analizar detenidamente la asignación de recursos en las fechas programadas.
 
La Competencia del Trabajo en Equipo, en una organización determina en buena parte la productividad de los integrantes de un conjunto. Los gerentes recurren a los empleados, teniéndolos en cuenta y dándoles participación en todos los procesos administrativos y productivos. De allí la importancia de planear los equipos adecuadamente; crear un entorno de apoyo mutuo y manejar las dinámicas del equipo en forma apropiada. Cuando la gerencia piensa en el trabajo en equipo, a menudo distingue entre integrantes y líderes. De ese modo, se considera una competencia que supone tomar unas veces el liderazgo, y otras veces apoyar a quienes la asumen y colaborar con los demás miembros de la organización, lo que conlleva a que puedan desempeñarse altamente, pero que necesitan un entorno de apoyo para lograrlo. La Competencia de Acción Estratégica, comprende así mismo entender la organización desde su filosofía, concibiendo en forma alineada la misión, la visión, los principios y valores institucionales como acciones propias de cada integrante de la empresa. En ese sentido, un gerente con una competencia para la acción estratégica bien desarrollada, diagnostica y evalúa las diferentes clases de problemas y aspectos administrativos que podrían surgir. En consecuencia, todo gerente debe percibir los cambios en el ambiente de la organización y estar preparado para adoptar acciones estratégicas para lograr la alineación total en la empresa.

Competencia para la Globalización, Un gerente posee competencias para la globalización, cuando recurre a recursos humanos, financieros y materiales de diversos países y está utilizando información de mercados abiertos de diversas culturas. Es preciso señalar, que todo gerente debe desarrollar las competencias para la globalización, adquiriendo conocimiento y comprensión cultural, mostrando siempre una actitud abierta y accesible al estar abierto a la apertura y a la sensibilidad cultural, puesto que no todas las organizaciones cuentan con mercados mundiales para sus productos y servicios. De allí la habilidad del gerente para aprovechar las leyes impositivas y mano de obra barata o mejor capacitada, logrando mayor posicionamiento empresarial. 

Finalmente tenemos La  Competencia en el Manejo Personal, esta enmarca los aspectos de integridad y comportamiento ético, dinamismo y capacidad de resistencia y equilibrio entre la exigencia del trabajo y la vida. Es por ello que el conocerse a sí mismo y desarrollar un elevado grado de destrezas técnicas, dan muestra de la especial importancia cuando una persona decide emprender algo novedoso e innovador. Al respecto, es importante que los gerentes puedan equilibrar las exigencias laborales y personales, conociendo sus buscando la forma de hacerlas compatibles. Si se alcanza ese objetivo, se está logrando el desafío profesional más difícil que muchos gerentes tengan que enfrentar. 

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual. 

Carlos O. Delgado C.
CEO de Liderazgo en tu Día & Management Trainer

domingo, 7 de agosto de 2016


 
08 de Agosto de 2016
Boletín No.258
 Factor Humano…
 
El Mundo que nos Rodea como ya sabemos se ha convertido en un conglomerado de interacciones humanas y obviamente personales que incluyen hasta las personas que no conocemos, sin embargo compartimos con ellas, reímos, lloramos y sentimos un sinfín de emociones solo por las vivencias que estimulan nuestra experiencia, en este caso a través de las Redes Sociales, de verdad que esto debería ser motivo de un análisis más concienzudo y riguroso que abordaremos en otra oportunidad. 

Sin embargo, quiero compartir contigo un texto tomado de esas redes sociales que tú y yo a lo mejor hemos visto y leído muchísimas veces y que nos habla de no perder nuestra esencia, ese factor humano que influye y nos potencia a nosotros mismos y a las personas de nuestro entorno, que a su vez, proyecta la gran diferencia y el reconocimiento en una persona que lidera, gerencia o dirige con verdadero sentido de “ser humano” base fundamental para ser un gran líder, gerente o director que pretenda guiar un equipo al éxito. Es así como les cuento que: 

“…Un joven fue a solicitar un puesto gerencial en una gran empresa, había pasado todas las pruebas y era el momento de entrevistarse con el Director General para así poder tomar la decisión final de su ingreso, poseía un Currículo impecable y de interesantes logros académicos. El Director inicialmente procede a preguntarle ¿recibió usted alguna beca? El joven le respondió “no” ¿fue tu padre quien pago tu colegiatura? “en realidad no, fue mi Madre, mi padre falleció cuando tenía un año de edad” y ¿Dónde trabaja su Madre? “mi Madre trabaja lavando ropa” ¿usted puede mostrarme sus manos? Al momento el joven acerco sus manos a la vista del Director y este observo unas manos suaves y perfectas. ¿Alguna vez usted ha ayudado a su Madre a lavar la ropa? “Nunca, mi Madre siempre quiso que estudiara y leyera más libros, además, mi Madre puede lavar la ropa más rápido que yo. El Director le dijo: “Tengo una petición: cuando vayas hoy a casa, ve y lava las manos de tu madre, y luego ven a verme mañana a primera hora.” El joven percibió una alta posibilidad de conseguir el trabajo, una vez en casa le pidió a su Madre que le permitiera lavar sus manos. Extrañada y feliz pero con sentimientos encontrados por aquella petición le entrego sus manos a su hijo. Era la primera vez que él se daba cuenta de las manos arrugadas, de tantos moretones y hematomas dolorosos que su madre poseía, tanto que ella se estremeció cuando su hijo la toco. Fue ahí, en ese preciso instante cuando el joven se dio cuenta del valor de ese par de manos que lavaban ropa todos los días para pagar su colegiatura, eran el precio pagado por su educación y su futuro. Esa noche el joven lavo toda la ropa y converso largo tiempo con su madre. A la mañana siguiente, a primera hora como fue el compromiso el Director recibió al joven, no pudiendo dejar de observar lágrimas en sus ojos cuando le pregunto ¿Qué has hecho y que has aprendido ayer en tu casa? El joven contesto: “lave las manos de mi Madre y también toda la ropa que quedaba. Ahora sé lo que es apreciar, reconocer. Sin mi madre, yo no sería quien soy hoy, al ayudarla me di cuenta de lo difícil y duro que es conseguir hacer algo por mi cuenta, he llegado a apreciar el valor y la importancia de ayudar a la familia. Ante la respuesta del joven el Director expuso claramente: “Esto es lo que yo busco en un Gerente. Quiero contratar a una persona que pueda apreciar la ayuda de los demás, alguien que conozca el sufrimiento de los demás para hacer las cosas, y una persona que no ponga el dinero como su única meta en la vida”. “Estas Contratado”.

Por todo lo expresado solo puedo aconsejarte lo siguiente, no pierdas la virtud de tu esencia, tu carácter humano y la humildad, que nadie confunda tu amabilidad con debilidad, pero no dejes de extender la mano para ayudar al crecimiento de otros, no llegaste a tu sitial por casualidad, entonces muestra con entereza, capacidad, talento y profundidad de “ser humano” porque eres el aclamado para ser el guía y generar el éxito que mereces, para ti, para los tuyos y tu organización.

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual. 
 
Carlos O. Delgado C.
CEO de Liderazgo en tu Día & Management Trainer

lunes, 1 de agosto de 2016


01 de Agosto de 2016

Boletín No.257

 
Instrucciones para la Vida (Personal y Profesional)…

Escudriñando en la biblioteca me encuentro con una escritura de Jackson Brown sobre los consejos que alguna vez impartió a su hijo, pero que son de profunda aplicación gerencial, directiva y con hondo impacto en el liderazgo que debes ejercer, a tales efectos me encargue de adecuarlos a nuestro medio y situación y lo comparto contigo:

Asóciate con la persona correcta, de esa decisión dependerá el  90% de tu éxito, y eso incluye parte de tu felicidad y hasta la miseria, no pierdas tu esencia ni la simpleza de espíritu, por eso no dejes de observar el amanecer por lo menos una vez al año para que entiendas la grandeza de tu Creador. Has empatía con la gente y sobre todo con tu gente, estréchales la mano con firmeza y míralos siempre a los ojos, permite que descubran en ellos tu sinceridad.

Deléitate con buena música, relájate con ella y comparte la alegría que ella inspira. Bríndate el placer y el honor de elegir un socio de la misma manera que elegirías a un compañero en el deporte que te agrada, es decir, que él sea fuerte donde tú seas débil y viceversa. No te preocupes por la gente que de alguna forma fanfarronea a tu lado, recuerda, nadie alardea de lo que le sobra. Ten presente en todo momento a los tuyos, recuerda atenderlos, sus cumpleaños, sus necesidades, que sientan tu presencia en su vida. Asimismo, evita a las personas Toxicas, Negativas, siempre te plantearan un problema para cada solución. Es importante que entiendas aunado a todo lo expresado que nunca existirá una segunda oportunidad para causar una buena primera impresión. Impacta y Consolidaras, eso es casi seguro.

No Olvides esta premisa, siempre lograras más de las personas por medio del estímulo que del reproche o la crítica, dile al débil que es fuerte y lo veras hacer fuerza, ni olvides que el silencio es a veces la mejor respuesta. En este mismo tenor te recomiendo no amenazar si no estás dispuesto a cumplir, como también, muestra un respeto extra por las personas que hacen el trabajo más pesado y consecuentemente observa a las personas desde la perspectiva de sus sandalias y no desde las tuyas. Con respecto a las finanzas, es sencillo y simple, no olvides el viejo proverbio que expresa: sin deudas, no hay peligros ni problemas. De igual manera te aconsejo equilibrarte, ten paciencia, calma y cordura porque no hay nada más difícil que responder a las preguntas de los necios. Aprende a compartir con los demás y descubre en cada instante la alegría de ser útil a tu prójimo, haciendo realidad en tu persona el lema “el que no sirve para servir, no sirve para vivir”. Honra tu tiempo y compromisos, acude con puntualidad a ellos, mantén respeto por el tiempo ajeno. Actúa con confianza con la gente, pero cierra tu auto con llave.

Nunca confundas confort con felicidad, ni riquezas con éxito. Tienes prohibido perder el sentido del humor, aprende a reírte de tus fallas y defectos. Asimismo, no esperes que las personas adivinen lo que quieres, si no lo dices. Trata a tus empleados o Equipo de Trabajo como tratas a tus clientes o tu familia, por ello escucha el doble de lo que hablas, de igual forma comprende que no debes colocarte metas imposibles y cerrando estos consejos, no dejes de comenzar tu día con alegría y agradecimiento y sobre todo coloca a Dios por delante de ti y por sobre todas las cosas.

Vivamos estas instrucciones y adaptémosla a nuestra  quehacer Personal y Profesional, seguro nos traerán buena cosecha de Vida.

Dios les Bendiga, mis Mejores Deseos y un Respetuoso Abrazo Virtual. 
 
Carlos O. Delgado C.
CEO de Liderazgo en tu Día & Management Trainer